Por Petra Alexander


Es raro encontrar a una familia que no tenga algún ser querido envuelto en dependencias ya sea a sustancias o a conductas. Afortunadamente, la organización católica Extensión Católica, ha ofrecido una certificación para ministrar con los adictos. Esta iniciativa se llama “Tengo Sed”, retomando el lema de la Madre Teresa de Calcuta en sus oratorios. Los graduados de Acompañantes Espirituales se reunieron con el Obispo Alberto Rojas, como una coalición de movimientos y grupos que trabajan con los adictos y sus familias en diversas comunidades. El Diácono Luis Ramírez está a la cabeza de la Mesa de Servicio y expresó:


“En el corazón de Tengo Sed está la comprensión de que hay una dimensión espiritual en la enfermedad de la adicción que no puede ser satisfecha por profesionales clínicos, sino solo por el consuelo espiritual y la guía que la iglesia puede proporcionar. Nosotros lo hacemos desde dos principios básicos, el programa de 12 Pasos de AA y la espiritualidad católica. Tengo Sed es un camino espiritual que nos lleva a tener una relación más íntima con nuestro Dios, aprender a dejarlo todo en sus manos y permitirle que Él transforme nuestras vidas. Para nosotros, los acompañantes que ofrecemos este servicio, entendemos a los afligidos y también el mandato de Jesús que nos invita a ir por el mundo y compartir la Buena Nueva de la salvación y compartir su mensaje de vida eterna.”


La Mesa de Servicio de la Pastoral de Adicciones, pidió al Obispo Rojas un apoyo más visible en la vida pastoral de la Diócesis, así como la celebración de la Eucaristía por vicariatos para los afligidos y sus familias. La primera será el próximo 07 de Septiembre en Indio. El diácono continuó: “La iniciativa Tengo Sed, trabaja como una hermandad de ministerios bajo una misma meta: ofrecer alivio y acompañamiento espiritual. Un servicio que hacemos sin fines de lucro no existe compensación económica ni se espera recibir nada a cambio. El deseo que sale del corazón es compartir fielmente y de manera gratuita este mensaje que puede salvar vidas. No somos profesionales, pero si contamos con la experiencia de vida en cuanto al padecimiento de esta enfermedad, podemos entender mejor que nadie los sufrimientos, los daños tanto físicos, sociales y espirituales que la enfermedad de una adición ocasiona y ya que hemos encontrado un camino a nuestra recuperación intentamos compartir los resultados y estrategias que pueden ayudar a alguien más a salir de esta enfermedad. El programa de 12 pasos de AA en sus inicios, nos motiva a dejar todo en manos de Dios como el único que nos puede ayudar a encontrar esa sanación y al final en paso 12, se nos invita a que después de haber alcanzado ese despertar espiritual hagamos dos cosas, compartir el mensaje y seguir practicando estos principios espirituales en todas las áreas de nuestra vida.”